Las dos primeras generaciones del hatchback del segmento B se vendieron en Argentina, y tuvimos uno que Europa no.
El Clio se vendió en Argentina en sus dos primeras generaciones entre 1994 y 2012, y luego llegó una variante única para el mercado sudamericano hasta 2016, y se fabricó en la Planta de Santa Isabel entre 1996 y 2016.
Renault Clio: breve historia
El Clio apareció en el mundo en 1990 como reemplazo del Renault 5, y rápidamente se abrió un espacio entre la competencia, logrando ser el Auto del Año en Europa en 1991, premio que volvió a ganar en 2006, y en 2002, 2003 y 2004 también obtuvo otros galardones como “mejor auto subcompacto” en México.
En sus 22 años en el mercado argentino, el Clio fue uno de los autos más elegidos, y a día de hoy sigue siendo una de las alternativas más tenidas en cuenta a la hora de comprar un auto usado, ya que fue ofrecido en una infinidad de versiones, con carrocería hatchback de tres o cinco puertas y sedán. Además, se ofrecieron variantes deportivas del Clio en ambas generaciones, que hoy hierven la sangre de los “fierreros” y valen fortunas. Repasamos las generaciones del Clio en Argentina.
Renault Clio I: 1990 -1998
La primera generación del Clio llegó a Argentina importado desde Francia, cuatro años después de su lanzamiento, y ya con un leve restyling encima, que retocaba las luces, principalmente.
El Clio I se vendió en Argentina con una carrocería hatchback de tres o cinco puertas y un diseño con líneas simples y mayormente rectas, que cautivó a muchas personas. La versión francesa venía con un motor 1.4 L carburado de 80 CV que según los medios que lo probaron, rendía muy bien.
En 1996 llegó otro rediseño menor para el Clio, con retoques en las luces, la parrilla y los espejos, volviéndolos más redondeados; pero lo más importante estaba en su fabricación, ya que era producido en Argentina en la Planta de Santa Isabel, en Córdoba.
Esta versión argentina del Clio mantenía el 1.4 de 80 CV del “pre-restyling”, pero con inyección monopunto, y sumaba dos opciones más:
- un 1.6 L de 74 CV con inyección monopunto
- un 1.9 L diésel de 65 CV.
Renault Clio II: 1998 – 2012
A fines de los 90, llegó una evolución del Clio, dejando de lado las líneas cuadradas y adoptando un diseño redondeado y mucho más agradable a la vista (en especial en sus mejores versiones).
La curiosidad del Clio 2 es que se ofreció también en una versión sedán (llamada Symbol en otros mercados), que se fabricaba en Turquía y Brasil y llegó a nuestro país.
La variante sedán del Clio, como casi todo tricuerpo basado en un hatchback del segmento B, no fue muy bien aceptada por su diseño, pero resultaba una alternativa muy conveniente por su gran capacidad de baúl y la fiabilidad que caracterizaba a los Clio.
Renault Clio II Fase 2
En 2003, el Clio II adoptó un restyling que incorporaba luces más grandes, una nueva parrilla y otros paragolpes, principalmente.
Las motorizaciones que usó el Clio II en sus 14 años en el mercado fueron:
- 1.9 L diésel de 65 CV
- 1.6 L 8V naftero (K7M) de 90 CV
- Más tarde estrenó el 1.6 L 16V (K4M) de 100 o 110 CV.
- 1.2 L 16V de 76 CV
- 1.5 L turbodiésel de 65 CV
Ambas generaciones del Clio tuvieron motores más potentes y prestacionales, que repasaremos más abajo en las versiones deportivas.
Clio Mío: 2012 – 2016
Si bien en Europa el Clio siguió teniendo otras generaciones, en Argentina nos quedamos con la segunda, que tuvo un rediseño profundo en 2012 para crear el “Clío Mío”, que estaba lejos de ser el Clio III que se vendía en Europa.
En términos de motorización, seguía con el 1.2 L de 75 CV del Clio II, y su atractivo estaba en las opciones de personalización, ya que si bien se ofrecían paquetes armados por la marca, se podían combinar, formando alrededor de 2.000 configuraciones distintas, a gusto de cada cliente.
Ya teniendo en claro las generaciones del Clio, pasemos a sus versiones “más picantes”.
Clio I RSi
El Clio de primera generación ofreció una variante más deportiva (pero no la mejor), con un 1.8 L 8V de 110 CV y 160 Nm, que lograba que este hatchback de poco menos de 1.000 kg acelerara de 0 a 100 en 8,9 segundos y alcanzara una velocidad máxima de 195 km/h. Estéticamente, tenía carrocería de tres puertas y se diferenciaba por las partes bajas, un alerón en el portón, las llantas exclusivas de 14” y las insignias que denominaban la versión “RSi”.
Clio I Williams
Sobre la base del Clio RSi, Renault Sport desarrolló uno de los modelos más codiciados de la historia de la marca: el Clio Williams, que nació para competir en los grupos A y N del Rally.
Si bien Renault ya estaba usando un Clio para Rally, basado en el RSi 1.8, el límite reglamentario del motor era de dos litros, así que la marca aprovechó eso y llevó el motor a esa cilindrada, logrando obtener una potencia de 150 CV. Las suspensiones, los frenos y las relaciones de caja también fueron mejoradas para obtener un mayor rendimiento y mejor comportamiento.
El “Willy” tuvo tres “fases”, y la segunda fue la que llegó a Argentina en alrededor de 200 unidades, todas de color azul con llantas doradas, y una de ellas fue usada como Pace Car de la Fórmula 1 en nuestro país, y de vez en cuando se deja ver en exposiciones (nótese la patente “AMG”).
Dato de color: Una de las curiosidades más grandes del Clio Williams es que el motor ocupaba tanto espacio en el vano que no había lugar para un compresor de aire acondicionado.
Se fabricaron alrededor de 12.000 unidades del Clio Williams entre sus tres “fases”, y quién sabe cuántas seguirán vivas.
Clio II Sport 1.6 y 2.0
El Clio II también tuvo sus variantes deportivas tanto en la primera fase como en la segunda, contando con unos paragolpes rediseñados, llantas exclusivas, dos motorizaciones y “más facha”, en general.
En términos de motorización, la versión 1.6 usaba el K4M de 110 CV, mientras que el 2.0 usaba un impulsor derivado del Laguna y el Scenic, pero con más potencia, llegando a unos 172 CV. Se podría decir que el 1.6 era la versión “con estética deportiva” (aunque su rendimiento era muy bueno) y el 2.0 es el que los fanáticos morían por tener.
Como dato curioso, el Clio II Sport tiene una de las publicidades más grandiosas de la industria, de esas que hoy no se podrían hacer. Te la dejamos abajo para que la mires.
Clio II V6
Si sos conocedor, ya te la veías venir, el delirio (por no decir otra cosa) de cuando Tom Walkinshaw Racing decidió ponerle un V6 a un Clio y Renault Sport lo hizo realidad. Así como escuchaste, la división deportiva de la marca francesa y TWR agarraron un Clio II, trasladaron el motor a una posición central, y se lo cambiaron por uno de seis cilindros en V de 2.9 L, proveniente del grupo PSA, que según si era fase 1 o 2 producía 230 o 255 CV, respectivamente.
Este delirio vino acompañado de un ensanche descomunal, unas llantas multirayo y varios refuerzos en el chasis, así como algunos retoques para mejorar la experiencia de manejo.
Las prestaciones del Clio II V6 eran excelentes, con un 0 a 100 km/h que rondaba los 6 segundos y una velocidad máxima de 235 km/h (fase 1) y 246 km/h (fase 2).
Se fabricaron 1.631 unidades del V6 fase 1 entre 2001 y 2002, y 1.309 del fase 2 entre 2003 y 2005 (y hay uno en Argentina).
Renault Clio en Europa y en la actualidad
El Clio siguió siendo vendido en otras partes del mundo, llegando hasta la quinta generación en la actualidad. Renault Argentina en su momento amagó un par de veces con traer el Clio IV, e incluso mostró algunos en el Salón de Buenos Aires (incluido uno “RS” que lo tiene el Presidente de Renault Argentina), pero nunca llegaron oficialmente.
El hatchback cesó su producción en Argentina en octubre de 2016, con un total de 549.648 unidades fabricadas en la Planta de Santa Isabel, siendo el II el más ensamblado, el “Mío” el segundo, y el I el tercero.